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La nueva Ley Audiovisual en España: llega tarde y con muchos temas por definir

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) cerró el pasado 13 de noviembre la consulta pública sobre la nueva “Ley Audiovisual”. Consiste en la aplicación de la regulación audiovisual a los prestadores de servicios de comunicación audiovisual que se soportan en plataformas de intercambio de vídeos. Esta nueva ley está a la espera de ser aprobada en el Congreso

La evolución tecnológica durante los últimos años y el cambio de consumo en la población ha obligado a crear una nueva legislación audiovisual que actualice la normativa actual. Uno de los principales cambios que propone esta nueva ley es que plataformas audiovisuales, de distribución de vídeos y de streaming paguen el 5% de sus ingresos generados en España para financiar obras audiovisuales europeas.

¿Qué propone la nueva Ley Audiovisual?

Esta nueva legislación contempla diversas medidas que suponen una mejora, pero también posee aspectos que todavía quedan por definir. Si bien esta ley incide en tres puntos, especialmente, que se exponen a continuación: 

  • El control de contenido: una de las mejoras que quiere introducir esta nueva ley es promover la inclusión dentro de la sociedad. Esto obliga a televisiones, plataformas audiovisuales, de streaming y de distribución de vídeos a ofrecer contenidos en los que se prohíba la incitación al odio y a la discriminación, apostando por un contenido inclusivo. 
  • La protección a menores: la ley incluye diversos apartados para la protección a menores de edad. Impone diversas obligaciones y especifica la diferenciación entre el contenido que pueda perjudicar seriamente el desarrollo de la persona menor de edad y el que no. El texto también incluye una referencia a la introducción de mecanismos de control parental o sistemas de codificación digital. 
  • Publicidad: el tema de la publicidad es una de las que más controversia está causando. El motivo es porque con esta nueva legislación se establece una mayor flexibilidad en el tiempo de la emisión comercial en la televisión lineal. Actualmente, existe un límite de 12 minutos por hora. Sin embargo, esta ley establece el tiempo por franjas. De tal manera que, por ejemplo, entre las seis de la mañana y las seis de la tarde se establecería un límite de 144 minutos. Esto podría afectar, especialmente, en horarios de prime time, en la que la cadena podría establecer una duración más alta de contenidos publicitarios.

La opinión de las personas expertas

El anteproyecto de Ley General de Comunicación Audiovisual ha generado mucho debate en las últimas semanas entre entidades y empresas del sector. La Unión de Televisiones Comerciales en Abierto (UTECA), a través de un comunicado, expresó la decepción por el contenido de esta nueva ley que considera que posee unas medidas “insuficientes”

Tras el cierre de la consulta pública, se está generando un debate sobre esta nueva ley que todavía no ha sido aprobada por el Congreso. Por este motivo, hemos hablado con tres personas expertas: Francesc-Josep Deó, director de Aula Mèdia; Marta Pellico, directora ejecutiva en iCmedia,  y Alejandro Perales, presidente de la Asociación de Usuarios de la Comunicación (AUC): 

¿Qué opinión tiene sobre la nueva Ley Audiovisual?

Francesc-Josep Deó: “Dicen que ‘más vale tarde que nunca’, y es cierto. Pero por lo que se refiere a la alfabetización mediática esta Ley llega tarde. Estamos en el mundo digital y nadie nos ha enseñado a leer con ojos críticos y mucho menos a crear mensajes mediáticos durante la etapa analógica. Diferentes organismos europeos, como la UNESCO, el Parlamento Europeo o la Comisión Europea, llevan insistiendo desde hace décadas, en la necesaria alfabetización mediática de toda la ciudadanía. Mientras otros países despliegan programas educativos de educación formal o informal, en el Estado español seguimos debatiendo si es necesaria o no y cómo hacerlo. AulaMèdia desde su inicio -el 2001- ha defendido que la alfabetización mediática del alumnado -y de la ciudadanía en general- debe ser la principal herramienta para entender y luchar contra la desinformación, los silencios mediáticos y la manipulación informativa. Estoy seguro de que esto a algunos medios les da miedo, o mejor dicho: ¡Pánico!”. 

Marta Pellico: “Es una ley que va con mucho retraso en España, pues tendría que ser trasladada a nuestro sistema legislativo en septiembre de 2020. Por distintos motivos tanto políticos como por la pandemia se ha retrasado todo el proceso, de manera que se ha tenido mucho tiempo en España para preparar este texto. En general, nos parece un texto que está bien, quizás menos ambicioso de lo que nos hubiera gustado porque es verdad que se está pensando mucho en la situación actual, pero esto es un contexto que evoluciona y crece en poquísimo tiempo y quizás cuando vaya a ser incorporada a nuestro cuerpo legislativo pues ya incluso puede nacer como poco antigua entre comillas porque esto va muy rápido y se tiene en cuenta realidades actuales. Quizás le falta un poco de visión de futuro a medio-largo plazo”.

Alejandro Perales: “Es un tópico, pero tiene luces y sombras como suele pasar con todo este tipo de regulaciones tan amplias. Tiene aspectos positivos desde el punto de vista de la protección de los usuarios y de los menores en particular. Al mismo tiempo tiene flexibilizaciones que la intención puede ser equilibrar los requisitos y las obligaciones para los diferentes prestadores de servicios de comunicación audiovisual y de intercambios de vídeo a través de plataforma que suponen un equilibrio hacia a la baja. En ese sentido, yo creo que medidas de desprotección de los usuarios”.

¿Considera que las medidas son suficientes?

Francesc-Josep Deó:Déjame ser un ‘pesimista activo’ en mi respuesta: no. Con el anteproyecto en la mano, creo más en el voluntarismo y la resiliencia del profesorado en el aula y de pequeños colectivos que trabajan en el ámbito sociocultural que en la legislación que está apunto de aprobarse porque creo que ‘con los medios hemos topado’. Espero que el mundo académico y las asociaciones que trabajan en el sector audiovisual presionen para conseguir un buen articulado claro y conciso para la implementación y seguimiento de la nueva ley”.

Marta Pellico: “Nos parece un texto adecuado y hemos hecho varios comentarios en temas en los que trabajamos desde ICMedia. Muchos de ellos están dirigidos al tema de la protección de menores. Uno de los apartados en el que se pueden hacer mejoras es el de alfabetización mediática, que para nosotros es un punto clave. Cada vez es más necesario que haya sistemas de educación a través de la educación formal o a través de la educación no formal que eviten la brecha digital, que nos ayuden a desarrollar competencias digitales y, desde nuestro punto de vista, consideramos muy importante la educación en el pensamiento crítico”.

Alejandro Perales: “Es un primer paso. Tiene un aspecto positivo que es ampliar el objeto de regulación. La normativa audiovisual empieza concentrándose por el propio entorno en los servicios de radiodifusión televisiva, que en España se amplió también los servicios de radiodifusión sonora. A partir del 2010 se empieza de forma incipiente a introducir servicios de comunicación no lineal que, en ese momento, no estaban contemplados. Ahora se da un nuevo paso que es la introducción de los servicios de intercambio de vídeos a través de plataforma. En ese sentido, la ampliación del objeto es el aspecto más positivo y más novedoso que tiene la norma”.

¿Qué cree que debería incluir esta Nueva Ley?

Francesc-Josep Deó: “Al margen del articulado, que debe mejorarse, creo que debería incluir una gran dosis de voluntad política del gobierno del estado, de los gobiernos autónomos y, sobre todo, de los medios de comunicación. Si miramos hacia el pasado y comparamos normativas la sensación es de déjà vu. La “Llei de la Comunicació Audiovisual de Catalunya” de 2005 o la “Ley General de la Comunicación Audiovisual” de 2010 recogían artículos con un contenido similar a la nueva ley sobre alfabetización mediática. ¿Cuál fue el resultado? Una campaña que era más una promoción de un canal de televisión que una verdadera campaña de sensibilización de la ciudadanía”.

Marta Pellico: “La ley debe permitir mecanismos que hagan que en el futuro podamos formar mejor al profesorado para que puedan trasladar esta formación al alumnado y crear políticas públicas para que, bien la administración o bien organizaciones sociales especializadas, podamos dar esta formación. Otro tema en el que hacemos muchísimo hincapié es en el tema de la información. Es importante que esa información esté armonizada, es decir, a través de todos los dispositivos recibamos la misma información y esas etiquetas estén homologadas. En tercer lugar, uno de los temas en los que hemos mostrado nuestra opinión es la necesidad de dotar a España de un regulador audiovisual con recursos económicos y recursos humanos suficientes como para llevar a cabo su labor de seguimiento y de cumplimiento de la ley que se le adjudican en este anteproyecto que ya tenía en la ley anterior y que cada vez es más amplio sus obligaciones. Pedimos un regulador audiovisual especializado y, sobre todo, con recursos económicos y humanos, que se le dote de la importancia que tiene”.

Alejandro Perales: “La norma no va lo suficientemente lejos a la hora de equiparar a los diferentes prestadores, sobre todo, porque en el tema de intercambio de vídeos a través de plataforma como YouTube, no queda demasiado claro en la ley la diferencia entre dos tipos de prestador: el prestador de la plataforma como tal, que se limita a distribuir contenidos y no tiene responsabilidad editorial en estos contenidos, y el prestador de los contenidos que se difunden a través de esas plataformas. La norma se queda corta y se queda confusa, además puede correr peligro, por su ambigüedad, de quedar obsoleta en la práctica en poco tiempo. A nosotros lo que más nos preocupa es que hay una flexibilización desde el punto de vista de las comunicaciones comerciales, entendiendo como positivo que se amplíen las regulaciones a todos los prestadores, pero hay una flexibilización en los tiempos publicitarios, por ejemplo. Una de las consecuencias que puede traer la nueva regulación es un aumento de la saturación publicitaria en aquellas horas a las que las televisiones les venga bien saturar. Desde el punto de vista de los menores, hay determinados aspectos que no quedan lo suficientemente claro cómo se van a aplicar para los diferentes prestadores”.