Cambiar la visión del mundo a través de los cuentos y erradicar los finales felices de los cuentos tradicionales. Ese es el objetivo de muchos relatos publicados recientemente, que abogan por la igualdad entre hombre y mujeres, entre niños y niñas. Algunos como los libros de Adela Turín, que se editaron en España hace más de treinta años por Esther Tusquets “a favor de las niñas” y ahora reeditados por Kalandraka, pretenden “poner en valor el rol femenino en la sociedad, erradicar los estereotipos sexistas y la discriminación, para cambiar mentalidades y construir un mundo mejor”.
- Rosa caramelo, de Adela Turin y Nella Bosnia (ilustración).
“Pequeñas, les decían los papás, si no coméis todas las anémonas, si no acabáis las peonías, nunca llegaréis a ser tan hermosas y rosadas como vuestras mamás, y nunca tendréis los ojos brillantes, y nadie querrá casarse con vosotras cuando …”
Resistencia callada para cambiar su vida y conseguir la libertad al igual que sus congéneres del otro sexo. Mientras las elefantas viven encerradas, los elefantes están libres en la sabana, en la naturaleza, sin normas, sin límites. Margarita logra romper los esquemas y abrir el mundo a las compañeras.
- Arturo y Clementina, de Adela Turin y Nella Bosnia (ilustración).
La historia comienza con la ilusión de formar un nuevo hogar por la pareja de tortugas, pero rápidamente se convierte en una anulación personal y pesada carga para ella. Consigue liberarse abandonado la casa con el consiguiente comentario por parte de Arturo: “que ingrata la tal Clementina”.
La narración identifica claramente los roles establecidos en la sociedad tanto de género como de familia. El sexo masculino, representado por Arturo, solucionará cualquier necesidad siempre que entre dentro de su esquema mental, educacional, social…pero menospreciando cualquier iniciativa de creatividad, aventura y autonomía por parte de Clementina, anulando su personalidad.
- Las princesas también se tiran pedos, de Ilan Brenman, Ionit Zilberman (ilustración). Editorial Algar.
El autor humaniza los personajes perfectos de los cuentos de hadas como son las princesas, estereotipos femeninos a imitar, desmitificándolos a través de la protagonista de la historia, Laura, pues descubre que ellas tienen las mismas necesidades fisiológicas que cualquier ser humano. Su padre le explica esa cotidianidad de las princesas con su libro escondido, dentro de su biblioteca llena de libros que transmiten secretos. Divulga que todos somos iguales.
- P de papá, de Isabel Minhós Martins y Bernardo Carvalho (ilustración). Editorial Kalandraka.
Sencillas ilustraciones de un padre y su hijo/a acompañadas por la palabra papá y otra en la que se transforma mostrando la complicidad entre ellos. Reivindica la figura paterna en la crianza de los hijos a través de los afectos y juegos.
- La vida secreta de las mamás, de Beatrice Masini y Alina Marais (Ilustración). Editor Laberinto.
“Las mamás del siglo XXI son muy distintas a las de antes, y lo que hacen desde que se despiertan hasta la hora de la merienda es un auténtico misterio para sus hijos”.
Descubrir y valorar que, a parte de ser mamas amorosas, entregadas a sus hijos y al hogar, no es su trabajo en exclusividad y pueden desarrollar ocupaciones fantásticas a la vez. Combina la realidad con la fantasía y no siempre aceptamos que esas heroínas representadas puedan ser nuestras madres. ¿Quizás lo cuestionamos porque los héroes siempre son en masculino?
Es muy amoroso encontrar estos cuentos, me ayudan en mi trabajo, sin embargo no tengo la descripción completa como para llevarlos a la práctica con niños y niñas de educación básica, primaria. Cómo
puedo obtener la descripción completa?